Diez edificios modernistas en Barcelona

De los muchos atractivos que tiene Barcelona, hay que destacar su impresionante arquitectura. Como ninguna otra ciudad del mundo, concentra una gran cantidad de edificios de estilo modernista. De hecho, está considerada la capital mundial del Modernismo.

Este estilo, dominó las artes y la arquitectura entre finales de siglo XIX y comienzos del XX, encontrando en Cataluña, una personalidad propia. Estos son 10 edificios modernistas que no debes perderte en Barcelona.

10 edificios modernistas de Barcelona

El modernismo se convirtió en el favorito de la época, gracias al impulso dado por la burguesía catalana. Tres arquitectos se destacaron por sus geniales creaciones, que hoy en día representan un invaluable legado modernista. Estos son: Antoni Gaudí, Lluís Domènech i Montaner y Josep Puig i Cadafalch. Estas son sus mejores obras.

Sagrada Familia

Actualmente, la Sagrada Familia es el monumento más representativo de Barcelona. La basílica, considerada la obra cumbre de Gaudí, es uno de los edificios del arquitecto que mejor resume la síntesis artística y creativa del arquitecto. Aún en construcción, se prevé que se termine en 2026.

 

 

 

Casa de les Punxes

La Casa de les Punxes es obra de Josep Puig i Cadafalch, arquitecto que lideró el movimiento modernista catalán junto a Gaudí y Doménech i Muntaner. Con un aspecto inspirado en un castillo, es el más reciente de los edificios modernistas de Barcelona en abrir sus puertas al público.

Casa Batlló

Con formas inspiradas en la naturaleza, Casa Batlló es otro icono modernista de Barcelona y una obra maestra de Gaudí. A pesar de que no se trató de un proyecto original sino de una reforma, Gaudí imprimió una mezcla genial de creatividad y funcionalidad en esta casa que mira hacia el Paseo de Gràcia. Revisita cómo era la casa originalmente con su videoguía y descubre las preciosas vistas desde su terraza.

Palau de la Música Catalana

Esta preciosa obra de Domènech i Montaner es una de las salas de conciertos más impresionantes de Barcelona. En su diseño, se desplegó toda la creatividad del modernismo para crear un espacio armónico para los sentidos, con una acústica inmejorable. Además de la perfección conseguida en la acústica, la decoración y belleza visual es uno de los elementos más característicos de esta sala de conciertos.

Casa Milá – La Pedrera

Ubicada en una de las esquinas más distinguidas del Paseo de Gràcia, La Pedrera, también conocida como la Casa Milá, es uno de los iconos más famosos de Barcelona. Construida y diseñada por Gaudí entre 1906 y 1910, es uno de los ejemplos más ilustres del movimiento modernista.

 

 

Recinto Modernista Sant Pau

El antes conocido como Hospital de Sant Pau, recientemente reconvertido como el Recinto Modernista Sant Pau, es uno de los complejos modernistas más grandes del mundo. El antiguo hospital diseñado por Domènech i Muntaner, es en la actualidad un centro donde conviven distintas instituciones en los campos de la educación, salud y sostenibilidad, pero por encima de todo, es un museo modernista en toda regla.

 

Parc Güell

De todos los proyectos que Gaudí proyectó en Barcelona, el Parc Güell sobresale como uno de los más legendarios y sin duda alguna, un lugar único en la ciudad. Sitio mítico de Barcelona como pocos, de entrada queda claro que este monumento Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, no es un parque como los demás.

 

Casa Amatller

Ubicada justo al lado de la Casa Batlló, en la llamada “manzana de la discordia”, la Casa Amatller es otra de las obras más conocidas de Puig i Cadafalch. Fue concebida para el industrial Antoni Amatller como un palacio gótico entre 1898 y 1900. Es Bien de Interés Cultural desde 1976.

 

Palau Güell

El Palau Güell fue el primer encargo importante de Gaudí y uno de los tantos que le confió Eusebi Güell, su mecenas más conocido. Diseñado en la etapa orientalista del arquitecto, el palacio muestra influencias orientales, islámicas y mudéjares, con el sello inequívoco de Gaudí. El edificio fue inaugurado en 1888, para coincidir con la Exposición Universal de Barcelona de ese año.

Casa Fuster